Luis Oyarzún Ferreira
Adela María Antonieta Fontaine al momento anterior a su muerte en 1948
La sepultura Oyarzún-Ferreira en el 2006Ramón Luis Cabrera Salas
Amada Maria Guzman y Solorza 
Al otro lado de río Mapocho (vereda opuesta que la plaza de Armas) se pobló el barrio la Chimba (del quechua “chimpa”: del otro lado.....del río) www.biblioredes.cl/BiblioRed/Nosotros+en+Internet/culturarecoleta/PATRIMONIO+CULTURAL
que estaba mas bien constituido por parcelas de agrado. El barrio gravitó entre las calles Independencia y Recoleta. Limita al sur con el borde del río Mapocho y al norte con el cerro Blanco. Itos del barrio que aún se encuentran ahí son las Iglesias Recoleta Franciscana y Dominicana ubicada en avenida Recoleta, el Cementerio General ubicado al final de la Avenida La Paz (al lado del cerro Blanco) y la Vega Central al borde del río. La familia Fontaine-Saavedra se instalo a vivir en ese barrio. Después de enviudar la abuela de su marido, don Lucho Oyarzún alrededor de 1934 se instalaron a vivir en el pasaje Pedro Montt número 10. Ahí tuvieron de vecinos a los Cabrera-Guzmán que vivían en el número 6. Este pasaje paralelo a la calle Davila, intersectaba con la calle Fariña en un extremo y Av. La Paz en el otro. La Sra. Antonieta Fontaine se había casado por la iglesia con un "caballero" de apellido Hidalgo con quien tuvo 2 hijos, el tío Antonio y la tía Inés. Cuando se creó casamiento civil en Chile, el Sr. Hidalgo se casó por el civil con una mujer más joven y abandonó a la abuela Antonieta. Cerca del año 1921, la Sra. Antonieta conoció a un hombre culto llamado Luis Oyarzún Ferreira con quien tuvo 5 hijos: Alicia, Luis (Lucho), Lucía, Eliana Catalina (Cata) y Juan Francisco (Nano). Celebró su matrimonio civil el 23 de Marzo, 1927 (como consta en la inscripcion 247 de Recoleta).
Luis Oyarzún Ferreira
Era casi 8 años menor que la abuela Antonieta y tenía una "garzonier" (departamento de soltero). Un gran conquistador (las mujeres se "morian" por Lucho) y posiblemente es quien ocupó el cargo público mas alto en la familia. Trabajó entre el ministerio de hacienda y la tesorería de la república durante el gobierno de Arturo Alessandri (Leon de Tarapacá) y perdió su trabajo despues del golpe militar de carlos Ibañez del Campo. Juntó fortuna y compró una casona en la calle Juarez donde Lucía, Lucho, Cata y Nano jugaban subiendose a los árboles frutales. Compró una sepultura en el cementerio general (patio Los Castaños Viejos) que aún existe y donde estan sepultados todos lo miembros de la familia Oyarzún con excepción de Cata.
Hay un terreno en San Sebastian a nombre de la sucesión Oyarzún cerca de la plaza. Don Lucho era un gran leedor y tenía gran cantidad de libros (el único que sobrevivió y esta en mi poder es la Biblia). Muchos años (1955) después de su muerte ví como los ratones se habían comido los libros guardados bajo la escalera en la casa 10. Tenía un mal carácter especialmente cuando se encontraba "cañoneado", hizo el "truco del mantel" cuando Don Sixto (amigo de la familia) llenó
la mesa de entremeses para agasajar a la abuela por su cumpleaños. Por supuesto Don Lucho se había olvidado. Gemo recuerda que casi nunca saludaba cuando se iba a trabajar caminando por el pasaje, sin embargo cuando venía a "medio filo" de vuelta a la casa se metía en la casa 6 a conversar con la abuela Amada. Era fiestero y le gustaba ir seguido a comer al restaurante "La Bahía". Murió joven (como de 40 años) y en forma violenta. La tía Inés cuenta que jugando carta de madrugada en un boliche del barrio Mapocho había ganado mucho dinero y se retiraba cuando para robarle lo empujaron por la escalera del segundo piso. Cuando enviudó la abuela Antonieta, Cata tenía como 8 años.
